La respuesta ya está entre nosotrxs: robótica, telemedicina y nuevas tecnologías de interacción son solo algunas de las respuestas que hospitales y clínicas de países avanzados ya están comenzando a incorporar en sus quirófanos y consultorios. Los centros médicos promoverán, a través de un uso cada vez mayor de tecnologías de la información y la comunicación, la atención descentralizada y consultas médicas a distancia. Las visitas al hospital sólo serán necesarias en casos de extrema urgencia o gravedad.
Sudok 1/Proveance
Si bien existen antecedentes de estructuras hospitalarias en Egipto, la India y Japón, puede decirse que el surgimiento de los hospitales en occidente tiene su origen en el año 529, con el modelo iniciado por la abadía de Montecasino y de los hospitales de tipo eclesiástico. Desde entonces los edificios hospitalarios fueron sufriendo transformaciones, con innovaciones que se originaron, en una primera etapa, para contener epidemias, mientras que ya a fines del siglo XIX, la construcción de nuevos hospitales se centró en la optimización de su funcionamiento.
El comienzo del siglo XXI plantea nuevos desafíos que obligan a los sistemas de salud en general, y las instituciones hospitalarias en particular, a desarrollar nuevos modelos de organización y de gestión que puedan dar respuesta a los nuevos perfiles de la demanda de atención sanitaria, marcada por el incremento de la esperanza de vida y la cronicidad de las patologías, así como las necesidades de “pronta respuesta” propias del ritmo cada vez más veloz de las sociedades del conocimiento.
La eSalud (eHealth en inglés) es el término con el que se define al conjunto de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) que se emplean en el entorno sanitario para asistir a las distintas áreas de salud, prevención, diagnóstico, tratamiento, y seguimiento, así como en la gestión de la salud, con el fin de disminuir los costos propios del sistema sanitario y mejorar la eficacia del mismo. Este novedoso conjunto de herramientas engloba diferentes productos y servicios para la salud, como aplicaciones móviles, la telemedicina, la robótica, los dispositivos wearables o portables –que permiten el monitoreo del paciente y se integran en su ropa y accesorios- el Big Data – almacenamiento y gestión de grandes cantidades de datos-, los sistemas de apoyo a la decisión clínica y los videojuegos de salud, entre otros.
ROBOTS ENFERMERXS QUE ENSEÑAN SU «OFICIO»
La posibilidad de tener robots como asistentes en hospitales y hogares es cada vez más real. De hecho gracias a tecnologías como RoboEarth -una especie de Internet para robots que funciona como un repositorio de datos donde los robots pueden compartir información y aprender los unos de los otros- la incorporación de asistencia robótica para tareas de acompañamiento de personas podrá realizarse sin la necesidad de tener que programar cada robot desde cero, tal como se evidenció recientemente en una demostración pública, en la que en una sala con un paciente se pudo ver cómo dos robots se comunicaban entre sí para que uno de ellos pudiera llegar a darle a la persona “enferma” un vaso de leche.
TELEMEDICINA
Si bien ya existen algunos casos, en un futuro no muy lejano la telemedicina comenzará a utilizarse en forma masiva por médicxs y pacientes. La idea es que el equipo médico pueda hacer un seguimiento a sus pacientes sin necesidad de que éstos se trasladen hasta el centro de salud. El servicio no sólo permitirá el seguimiento de enfermedades, sino también ofrecer asistencia en áreas de atención primaria que no cuentan con médicxs especialistas, como en el caso de Jarrio, Cangas y Arriondas, áreas rurales pertenecientes a la comunidad autónoma española de Asturias, cuyas autoridades planean implementar un sistema de apoyo remoto con equipos de especialistas en neurología. Así, ante una urgencia, el/la paciente podrá ser asistido por un/a especialista ubicado físicamente a cientos de kilómetros de distancia, quien podrá decidir cuál será el procedimiento en función del diagnóstico.
HEARABLES: ASISTENTES DE SALUD EN EL OÍDO
Warner Bros. Pictures/ La eSalud
Se trata de auriculares dotados con sensores de constantes vitales conectados a la Red o, incluso, a una inteligencia artificial. Como señala La eSalud, revista especializada en salud y nuevas tecnologías: “estos dispositivos pueden convertirse en los nuevos asistentes de salud personales; así parecen indicarlo las novedades que están apareciendo en el Mobile World Congress (MWC) de Barcelona, que convierten en realidad conceptos futuristas que habíamos visto en películas, como Her, protagonizada por Joaquin Phoenix”.
NUEVAS FORMAS DE INTERACCIÓN EN EL QUIRÓFANO
El quirófano es uno de los entornos sanitarios más sensibles debido a la necesidad de mantener extremas condiciones de asepsia. Por tal motivo muchos centro de salud han comenzado a incorporar TedCas, una tecnología basada en la optoelectrónica que permite al equipo médico acceder a la información digital sin necesidad de contacto (es decir de una forma intuitiva) y por lo tanto sin tener que abandonar la zona estéril, para de este modo prevenir las infecciones por contacto.
CAMAS INTELIGENTES
En un futuro no tan lejano las habitaciones de internación de algunos hospitales comenzarán a incorporar camas inteligentes que, sin necesidad de otros exámenes, captarán datos como la presión arterial, temperatura y ritmo cardíaco del/de la paciente. Esa información será enviada en forma automática al médico, quien podrá recibir los datos donde sea que se encuentre, claro.
A modo de conclusión podemos decir que el hospital del futuro estará pensado para responder a las necesidades de una población marcada por el aumento de la esperanza de vida y el descenso de la natalidad, por lo que se atenderán pacientes de mayor edad, con pluripatologías más complejas y cuyo tratamiento representará un aumento en el consumo de recursos para las instituciones. Frente a esto la industria médica promoverá la atención descentralizada a partir de tecnologías como la telemedicina y los asistentes de salud remotos. En palabras de la especialista en Sistemas de Monitorización de Pacientes, Jackie Gubbioli, “los hospitales deberán modificarse en el sentido de reducir las áreas de hospitalización (que se verán compensadas con un incremento de la atención primaria, la medicina ambulatoria, la cirugía sin ingreso y la atención domiciliaria), al tiempo que se destinarán más recursos al entorno del paciente críticamente enfermo que necesite obligatoriamente de una medicina hospitalaria”.
*Foto cabecera: Luís Louro/Pasanic.com
