Se trata del primer supermercado gluten free de Argentina, un comercio especializado en la venta exclusiva de productos sin T.A.C.C, destinado a quienes tienen celiaquía pero también para aquellxs que eligen no consumir productos basados en la harina de trigo, principal ingrediente con el que se elaboran la mayoría de los alimentos que se venden en los supermercados habituales. El comercio ofrece una gran variedad de productos que van desde lácteos, fiambres, harinas, panificados, hasta productos de belleza como shampoo y cremas corporales. Es considerado el supermercado más grande de Latinoamérica en su tipo.
El supermercado Rojas Gluten Free es un comercio que abarca unos 150 m2 y puede considerarse “el sueño cumplido” de quienes tienen intolerancia al gluten y no pueden ingerir productos con T.A.C.C –sigla que refiere a las iniciales de los cuatro ingredientes “prohibidos” para aquellas personas que tienen celiaquía, es decir aquellos que contengan trigo, avena, cebada y centeno. Seguramente quienes lean este artículo sabrán, por experiencia propia o de familiares o amigos, las dificultades que cotidianamente deben enfrentar quienes quieran consumir panificados, tartas, tortas y todo tipo de alimentos, en su mayoría producidos a base de harina refinada de trigo.
Hasta el momento los únicos reductos que lxs que lxs celíacxs y todxs aquellxs que deseen evitar el consumo de gluten tienen son las dietéticas, es decir pequeños comercios que ofrecen una variedad, limitada en la mayoría de los casos, de productos con las características mencionadas. Sin embargo, desde fines del 2015 existe, en la ciudad de Buenos Aires, un supermercado de venta exclusiva de productos sin gluten, un comercio con una oferta mucho más variada de productos, no sólo en cantidad y calidad, sino también en lo que refiere a tipos de alimentos, como leches chocolatadas, fiambres, salchichas, quesos, bebidas energizantes, jugos de frutas orgánicos, panes frescos y panes para panchos, además de shampoo y cremas corporales (los productos de belleza en general contienen derivados a base a avena).
“¿Entienden lo que significa para un celíaco llegar al supermercado con su familia y agarrar un changuito y disfrutar de las góndolas sin leer las etiquetas? Es una experiencia emocionante, la gente llega acá y cuenta su historia, la cotidiana experiencia de una madre con su hija celíaca de agarrar su changuito y hacer las compras como cualquier persona lo hace, es para el celíaco una alegría, una felicidad”, relata a Convivir Press John Fernandes, quien esta al frente de este supermercado ubicado en Rojas 42, en el barrio porteño de Caballito.
“Estamos en el rubro dietética desde hace más de 20 años y a pedido de los clientes celíacos surgió esta idea de abrir un supermercado 100 por ciento gluten free, nuestro espacio cuenta con 150 m2 y todas nuestras góndolas con productos sin Tacc”, agrega John Fernándes, este portugués que, junto a la ayuda de un equipo de empleadxs especializadxs, ofrecen datos a lxs clientes, quienes agradecen no sólo lal información sino el buen trato y la cordialidad con que allí se encuentran. Así lo describe el periódico local, Caballito Te Quiero: “una particularidad del comercio es que, sólo cierra un día por semana y no lo hace durante los feriados. Esto se debe a una profunda toma de conciencia de su dueño y empleados sobre la función social que cumplen. Su actitud responsable y solidaria, permite que, los afectados por la enfermedad puedan disponer de sus alimentos en todo momento”.
Quizás la mayor importancia de la existencia de este tipo de emprendimiento sea, justamente, evidenciar la necesidad de comenzar a dar lugar a un tipo de consumo distinto, por fuera de los grandes lineamientos que las trasnacionales alimenticias han impuesto a lo largo de décadas (la mayoría de los productos que consumimos estan elaborados a base de harina de trigo, considerada uno de los «cinco venenos blancos» de la alimentación). A esta alternativa se suman otras iniciativas como los supermercados que no generan residuos, basados en un modelo de consumo responsable que intenta priorizar la venta de alimentos de producción local por sobre los generados por grandes compañías internacionales, de manera de fomentar el trabajo regional, a la vez de disminuir el consumo de grandes embalajes y las emisiones de carbono, al reducir la cantidad y duración de los viajes para el traslado de mercaderías.
*Foto cabecera: Be Well Philly