¿Alguna vez se preguntaron qué significan las zapatillas que cuelgan de los tendidos eléctricos? Desde marcar territorios hasta arte callejero, muchas son las teorías que explican esta singular práctica que ya tiene muchos años en Latinoamérica y que lentamente se extendió al resto del globo.
Si bien es muy difícil comprobar en qué lugar surgió originalmente, la práctica de colgar zapatos y zapatillas del tendido eléctrico tiene un punto común: se empezó a ver en ciudades marginales.
En Estados Unidos, por ejemplo, comenzó como una moda de arte callejero bajo el nombre de “Shoeffiti” -una combinación entre “Shoe” (zapatilla) y “Graffiti- como una demostración de inconformismo social de los barrios más humildes.
Pero lo cierto es que existen otras interpretaciones – o mitos urbanos- alrededor de las zapatillas colgantes, sobre todo en países sudamericanos como Colombia, Brasil, Ecuador, Perú, Argentina y con la proliferación de Internet, en países europeos como Alemania, Gran Bretaña o España.
Algunxs explican que sirven para señalizar los lugares de venta o consumo de drogas. Otrxs señalan que esta práctica es utilizada por “pandillerxs” para conmemorar a uno de sus miembros asesinado, o simplemente para establecer límites zonales o señalizar lugares apropiados para robar. Todo depende del tipo de calzado que se utilice.
Sin embargo, otras apreciaciones nada tienen que ver con hechos ilícitos. Algunxs apuntan que esta práctica es muy común para festejar el fin de una carrera o una propuesta de matrimonio, incluso para anunciar entre amigxs la primera relación sexual.
En algunas zonas como Nueva Zelanda, el fenómeno de los zapatos colgantes se convirtió en un deporte amateur. En algunas zonas rurales los agricultores compiten para lanzar las botas o zapatos lo más lejos o alto posible.
Los militares suelen pintar sus botas de color amarillo o naranja y posteriormente las lanzan a tendidos eléctricos o cables del teléfono para simbolizar las zonas donde han sido asignados. Otra leyenda peculiar sostiene que los zapatos que se cuelgan pertenecen a personas recientemente fallecidas no sólo como una forma de informar el deceso sino para que su espíritu permanezca más cerca del cielo.
Sin dudas, esta práctica dio lugar al desarrollo de las más increíbles leyendas urbanas pero ¿cuál es la versión más extendida sobre este asunto en tu ciudad?.
Fuente: Super Curioso